TRANSPORTISTAS NO ESTAN CONFORMES

Los acuerdos entre la transportación urbana del país y el Gobierno dejan descontentos y dudas. Por el lado gubernamental parece un triunfo político, por el otro lado se interpreta como una pérdida. Una reunión de cinco horas y media, la tarde y noche del miércoles en la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), centro de Guayaquil, reflejó que no fue fácil llegar a consensos. En rueda de prensa al término de la cita, Alberto Arias, presidente de la Federación Nacional de Transportistas Urbanos (FENATU), destacó que "hemos llegado a grandes acuerdos que representen una paz ciudadana". Fue luego de conocerse los beneficios que se otorgará al sector, anunciado por María Duarte, ministra de Transporte y Obras Públicas. Pero el sentimiento de la dirigencia no es el mismo. Jorge Yánez, del Consorcio de Movilidad del Corredor Sur Oriental de Quito, dijo que "lastimosamente las peticiones hechas por la transportación no fueron recogidas por los delegados del Gobierno". Explicó que las aspiraciones del sector, sustentadas en estudios técnicos, era de USD 0,38 pero no fueron consideradas. "Los estudios no pudieron ser rebatidos y fueron cotejados por las partes. Pero al final el Gobierno sacó un estudio que, en definitiva, no tenía ninguna sustentabilidad". Yánez comentó que el Gobierno terminó ofertando una tarifa de USD 0,30 para los buses troncalizados pero luego se retractaron y ofrecieron compensar con USD 350 mensuales para los buses y USD 600 para los troncalizados, como compensación por la media tarifa subsidiada. "Eso representa USD 12 diarios y no compensa lo que hemos perdido en ocho años. Mañana (hoy) tendremos una reunión con la cúpula de la transportación de Quito para que se defina una posición. Las bases nos mandaron con la misión que se revisen las tarifas. Al no haber resultados serán las bases las que decidan", acotó. El Comercio, 16 dic. 2011, p. 8