DESAZÓN DEL SECTOR EMPRESARIAL POR POSIBLE NEGOCIACIÓN CON MERCOSUR

Con desconcierto y preocupación, los empresarios ecuatorianos tomaron la decisión del Gobierno de solicitar el ingreso al Mercado Común del Sur (MERCOSUR) como miembro pleno. En estos últimos nueve años el Ecuador se ha mantenido como observador. Desde que el presidente Rafael Correa anunció por primera vez, a finales del 2011, el deseo de formar filas oficialmente de este bloque, el sector privado nacional ha expresado su oposición debido al impacto negativo que podría significar para sus actividades. Incluso han llamado la atención del Régimen con un reciente informe de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) donde se alerta de una caída de la actividad económica si el país se adhiere plenamente al Mercosur. "Productos importados pudieran invadir el mercado local y afectar a la industria, además de reducir los ingresos arancelarios", señala el documento regional. En la misma línea, los empresarios añaden que, en el bloque, los aranceles que pagan los países miembros son reducidos o nulos, lo cual no sucede con los productos que provienen de terceros países. Los bienes de naciones fuera del bloque se vuelven más caros por el mayor Arancel Externo Común del Mercosur. Para materias primas y bienes de capital es de entre 7 y 12 por ciento, mientras que Ecuador tiene aranceles entre el 0 y 5 por ciento. El Comercio, 21 junio 2013, p. 6